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Amplían menú para que fondos comunes inviertan en instrumentos Pyme

Los FCI abiertos podrán apostar por facturas electrónicas y cheques no endosados en primera instancia, certificados de obra y cuotapartes
de fondos cerrados.

La Comisión Nacional de Valores (CNV) permitió que los fondos comunes de inversión PyMe puedan apostar por nuevas opciones, como por ejemplo las facturas de crédito electrónicas, cheques no garantizados en primer endoso, certificados de obra y cuotapartes de fondos de inversión cerrados.

De esta manera, el regulador profundiza su acción para impulsar el financiamiento de las pequeñas y medianas empresas, las principales afectadas por las consecuencias del apretón monetario.
Esta estrategia se suma a la medida anunciada por la Superintendencia de Seguros de la Nación la semana pasada, que amplía los instrumentos PyME en los que pueden invertir las compañías de seguros. «Ambas medidas permitirán aumentar el abanico de opciones de financiamiento para las PyMEs», destacó el organismo que preside Marcos Ayerra en un comunicado.
Tal como publicara oportunamente El Cronista, recientemente la Superintendencia de Seguros de la Nación modificó el reglamento de la actividad aseguradora para llevar de 3% a 5% el mínimo de inversiones en instrumentos financieros pyme de estas entidades.

Al mismo tiempo, se incorporó, además, nuevos instrumentos emitidos, descontados y/o negociados por PyMEs en mercados de valores. Estos serán cheques de pago diferido, facturas de crédito electrónicas, pagarés avalados, certificados de obra pública emitidos a favor de pymes, obligaciones negociables, valores fiduciarios y/o valores representativos de deuda emitidos por el Fondo Nacional de Desarrollo Productivo.
«Este 2% que se incrementó representa unos $12500 millones que se van a volcar al mercado Pyme, que hasta ahora estaba mayormente fondeado por cheques de pago diferido. Hoy lo que está haciendo falta son activos y me parece que la medida va a apuntalar a las compañías de seguros que están obligadas a buscarlos», dijo Pedro Cristiá de First Capital Markets.
El regulador busca darle profundidad a nuevas formas de financiamiento, como las facturas de crédito MiPyme, que fueron reglamentadas a principio de año.» Se abre un abanico y una vez que se abre la posibilidad, seguramente los fondos comiencen a explorar», puntualizó Diego Falcone, de Cohen SA. «En el caso de los cheques de pagos diferidos, las facturas pueden dar una buena herramienta, pero como todo es algo que se tiene que desarrollar. Es importante ver cómo administran y cómo evalúan
estos instrumentos cada una de las gestoras de fondos», añadió.
El financiamiento de las pequeñas y medianas empresas se resintió en el último año, aunque en enero repuntó respecto a lo que se había visto en diciembre. Según los últimos datos disponibles del mercado, publicados por la CNV a mediados del mes pasado, las PyMe representaron el 37% del total de las empresas que acudieron al mercado en busca de fondeo en enero, que totalizó $ 5.526 millones. Basicamente, eligieron para financiarse los cheques de pagos diferidos y los pagares avalados.

Fuente: Cronista